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Ébola en Europa y España

Casos sospechosos de Ébola en España y Europa, pánico a causa del Ébola.

El 6 de octubre de 2014 se confirmó en España el primer caso de Ébola originado en Europa desde que la epidemia estallara en África.

España


El 21 de septiembre de 2014, el Ministerio de Salud español emitió un comunicado de prensa informando de un segundo caso de Ébola en un ciudadano español: Manuel García Viejo, un misionero católico, fue evacuado a España desde Sierra Leona.


El jueves 25 de septiembre, el Ministerio de Sanidad español anunció la muerte del misionero en Madrid, a causa de la infección con el virus en Sierra Leona.

El 6 de octubre de 2014, se confirmaba el primer caso de contagio de Ébola dentro de España y de Europa. La afectada era Teresa Romero, una auxiliar de enfermería del Hospital Carlos III La Paz de Madrid, que había atendido a Manuel García Viejo, el primer español contagiado por Ébola que falleció. Más de un centenar de personas que habían tenido contacto con la auxiliar fueron puestas en cuarentena en dicho hospital. El 21 de octubre de 2014, se confirmó que Teresa Romero dio negativo al virus del Ébola tras superar la enfermedad. No se especificó con certeza cuál fue la causa de su curación, aunque se piensa que pudo ser debida a dos transfusiones de sangre con anticuerpos anti-Ébola procedentes de otra persona que superó la enfermedad.

En España, la preocupación provocada por la enfermedad del Ébola dio lugar a tres falsas alarmas en los primeros días. El 17 de agosto de 2014, un hospital de Alicante informó de un caso sospechoso de Ébola en un varón de unos 30 años, que había viajado desde Nigeria, con fiebre, vómitos y hemorragias. Sin embargo, las pruebas descartaron que padeciera Ébola.

El día 18 de agosto de 2014 se produjo un incidente en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas después de que un hombre sufriera espasmos y vómitos. Las autoridades del aeropuerto pusieron en marcha el protocolo contra el Ébola, acordonando la zona y proporcionándole asistencia con personal sanitario equipado con trajes protectores. Tras las pruebas realizadas por un segundo grupo de médicos se determinó que el paciente no padecía Ebola.

También el día 18 se activó el protocolo contra el Ébola en un hospital de Bilbao debido a una persona que presentaba síntomas de fiebre tras regresar de un viaje de negocios en Sierra Leona. Se pidió calma a la población y al día siguiente se anunció que el paciente había dado negativo para el virus del Ébola.

Virus del Ébola en Europa y España
El 31 de agosto de 2014 ingresó en el Hospital Carlos Haya de Málaga un hombre nigeriano de 40 años que había regresado hacía pocos días de Nigeria, y que tenía fiebre alta. Las muestras fueron remitidas al Centro Nacional de Microbiología del Instituto Carlos III de Madrid para su confirmación, demostrándose que no se trataba de Ébola sino de paludismo. A pesar de no tratarse de Ébola, este caso mostró que existían aún serias deficiencias en el sistema de salud español para hacer frente a una posible epidemia de Ébola. Según los sindicatos del hospital, el afectado fue al hospital en su vehículo con la familia, entró por su pie en la zona de Urgencias, pasó a una consulta, llegó a la zona de aislamiento cuando estaba aún ocupada por otros pacientes con infecciones, no se informó al personal del siguiente turno de las zonas por las que había pasado el posible afectado, el personal no tenía formación ante estos casos ni había sido informado de cómo actuar, no existía material adecuado, etc.

En otros lugares de España, como Canarias o Ceuta y Melilla, con una gran afluencia de inmigrantes procedentes de África, los ciudadanos mostraron su preocupación ante una posible entrada del Ébola por sus fronteras, pero las autoridades sanitarias mostraron tranquilidad ante la lejanía de los países afectados por Ébola y los protocolos contra el Ébola que estaban en marcha.

Francia


Una voluntaria francesa, que trabajaba para Médicos Sin Fronteras en Liberia, contrajo el virus y fue trasladada en avión a Francia el 18 de septiembre. Está siendo tratada en un hospital militar. La ministra de Salud francesa, Marisol Touraine, dijo que la enfermera estaba recibiendo un medicamento experimental.

Alemania


En Alemania, unas 600 personas quedaron en cuarentena durante dos horas en una oficina de empleo de Berlín después de una falsa alarma de Ébola. Una mujer de 30 años de edad procedente de África occidental se había caído en dicha oficina de empleo, por lo que el centro fue puesto en cuarentena por Ébola después de que la mujer comunicara a los médicos que había estado en contacto directo con las víctimas del Ébola en su país natal. Sin embargo, cuando la mujer fue examinada en una sala de aislamiento en el hospital Charité de Berlín, los médicos dijeron que no había visitado ningún área afectada por el virus y que sufría una infección intestinal.

Irlanda


En Irlanda, el cuerpo de Dessie Quinn, un ingeniero irlandés que había trabajado en África occidental, fue puesto en cuarentena en un hospital hasta poder hacerle las pruebas de Ébola. Quinn fue encontrado muerto en su casa de Mountcharles en Donegal, y su cuerpo fue llevado al hospital general del condado de Letterkenny donde fue aislado. Las pruebas de Ébola se llevaron a cabo debido a que había estado trabajando en Sierra Leona quince días antes. Su familia dijo que estaban molestos porque el cuerpo de su familiar había sido colocado en un área de cuarentena del hospital sin su conocimiento previo.

Reino Unido


El 23 de agosto de 2014, William Pooley, un británico que trabajaba como enfermero para una organización caritativa dio positivo para el virus del Ébola en Sierra Leona. Las autoridades británicas decidieron transportarle al Reino Unido después de que los ministros concluyeran que no existía ningún riesgo de que la repatriación pudiera desencadenar un brote de Ébola en el Reino Unido. Para su evacuación se dispuso un avión militar de la RAF equipado con una carpa de aislamiento. Se estableció que permaneciera ingresado en el Hospital Royal Free de Hampstead Heath (al norte de Londres), el único hospital en Gran Bretaña equipado para tratar a pacientes de Ébola y contener el virus. Dicho hospital contiene sólo dos camas en una sala lo suficientemente grande como para dar cabida normalmente a veinte. Los médicos que le atenderán estarán encerrados en la misma tienda de aislamiento para Ébola utilizada para transportarlo desde Sierra Leona, para minimizar el riesgo de contaminación. La unidad del hospital contiene una gran variedad de equipos especiales para garantizar que no pase el virus, incluyendo un flujo de aire con "presión negativa" para asegurarse de que las partículas de virus no escapan ya sea de la tienda o de la habitación en sí. El Dr. Stephen Mepham, experto en enfermedades infecciosas, será uno de los encargados de atenderle. El director médico del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido dijo que no había ninguna razón para que el público británico sintiera miedo.

Suiza


El 22 de septiembre de 2014, un enfermero suizo fue trasladado en avión a Ginebra tras haber sido mordido por un niño infectado con el Ébola en Sierra Leona. El enfermero fue puesto en aislamiento durante 21 días en el Hospital de la Universidad de Ginebra. El Ministerio de Salud suizo dijo que es poco probable que estuviera infectado, pero que se le vigilaba como un potencial paciente Ébola hasta que el período de incubación hubiera pasado.